lunes, 28 de octubre de 2013

Recuerdos inventados...


Yo tenía cerca de 3 años cuando nació mi hermana menor. Vivíamos en Quillota. Recuerdo bien cuando llegó a casa. Yo estaba jugando en la calle, en una suerte de triciclo, cuando veo acercarse el Citroën 2CV de color azul que tenía mi papá. Era una Citroneta linda, azul eléctrico, con interior crema. Mi mamá se baja con Tania en brazos, yo me acerco, me la muestra y luego entran. La casa quedaba en un barrio con una calle amplia, a la que se accedía por un pasaje, por lo que era un recinto seguro para los niños.

Ese es el recuerdo que tengo de la llegada de Tania. Ahora no sé si es un recuerdo real o yo lo inventé y de tanto repetirlo y contarlo en el tiempo, lo hice real en mi mente, aunque en la práctica no haya existido nunca esa vivencia. 

Tengo esa duda y, a estas alturas, no tengo con quién contrastarla. Nunca le pregunté a mamá cómo fue la llegada de Tania a casa, si verdaderamente ella llegó en la Citroneta azul y yo estaba jugando en la calle. Me parece romántica la idea de acordarse de un hito familiar con ese nivel de detalle a pesar de haber ocurrido cuando era tan pequeño, pero tengo la leve sospecha -¿leve?- de que todo es inventado. Por qué lo inventé, cuándo construí esa imagen, quién la fomentó...no lo sé.

También tengo otro recuerdo de pequeño. Otra vez en Quillota. Yo jugaba en la orilla de una piscina y caigo al agua sin saber nadar. El pataleo desesperado me aleja de la orilla y avanzo hacia el centro de la alberca. Mi mamá se lanza a la piscina sin saber nadar y me rescata. Sé que todo lo que recuerdo de esta experiencia es lo que me contó mamá, porque en la imagen que tengo, que por lo demás es muy vívida, es la de un espectador, una tercera persona ajena que mira todo lo que ocurrió. Es un recuerdo con un buen montaje, porque me veo jugando, cuando caigo, cuando pataleo, me veo debajo del agua y luego a mamá lanzándose al agua. Sé que este es un recuerdo inventado, pero me gusta tenerlo y atesorarlo.

Cuántos de mis recuerdo de infancia son reales y cuántos inventados. Me habré caído y roto la boca por caminar con las manos en los bolsillos y no alcanzar a reaccionar en ...¿Vallenar?, realmente subía más rápido los árboles de la plazoleta de Copiapó porque usaba botas negras de cuero, de verdad un compañero me pegó en la cabeza antes de sacarnos una foto en el jardín infantil donde mi mascota era un payaso, es cierto que me acuerdo de que en un jardín veía Cenicienta o Blanca Nieves en una pantalla gigante a la espera de que llegaran a retirarme. No lo sé.


2 comentarios:

  1. A mi tb me pasa, es como el mal de Diógenes pero en mi cabeza, coleccionando recuerdos de antaño, colores, sensaciones, olores.. y a veces por distintas situaciones me traslado en el tiempo y llega un nuevo recuerdo de lo que una vez viví, pero bueno, quien sabe, quizás tb lo invento …

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  2. Yo te puedo ayudar con algunos, a la Tania la fuimos a buscar en el auto porque yo recuerdo haberla visto en el auto y mamá la llevaba en brazos y nos la mostraba hacia atrás... te caíste en la piscina, eso fue verdad jugágabamos por el borde dentro de la piscina para adultos habían unas barandas donde nos afirmábamos, no recuerdo si fue ne Quillota o Copiapó, pero efectivamente la mamá te rescató. Y, si había un jardín donde les proyectaban películas, yo también me pegaba y de golpes en la cabeza no alcanzo a tener el registro de todas caídas y idas al hospital a ponerte puntos en la cabeza... pero a pesar de todo tienes muy buena memoria, hay cosas que tienen mejores detalles que los míos...

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