
Primero bordeando el mar. Vimos el peligro de cerca. David mató a su celular, Mauro sufrió los embates de las olas y yo me caí intentando cruzar un precipicio. Juan, fiel a su etilo de Sportacus, salió invicto. No así su botella de jugo. Fueron casi tres horas de caminata.
Vimos las animitas de quienes intentaron el mismo trayecto y perecieron en el intento, los jotes nos persiguieron durante todo el recorrido y encontramos lobos muertos que no soportaron la fuerza del mar golpeando contra las rocas. Nosotros superamos todo eso.
SUBE Y BAJA
Llegamos a Juan López y fuimos en busca de las micros para volver a la playa en busca del monstruoso Trooper. Como nunca llegaron las dichosas micros, tuvimos que volver caminando. Esta vez por la ruta y luego

Y tras cinco horas de valiente caminata, que culminaron con una arrojada expedición a una cueva abandonada, un pique minero de casi
Pero tranquilos estimados lectores, porque antes programaremos una excursión por todo el día. Tenemos que probarnos. Pero, pese a la edad y el estado físico, puedo decir que no estamos tan mal. No fue el París Dakar, ok lo admitimos, pero tampoco fue un paseíto cualquiera. Estamos como el vino. Ja.
Mis Felicitaciones!
ResponderEliminarDebo confesar que en algún momento pensé que no lo lograrían, pero una vez más cumplen su objetivo y de verdad que los felicito y de todas maneras creo que podrán cumplir el objetivo de hacer la Ruta del Loa.
Animo y cuenten con mi apoyo:
Susy
Jajajaja...Los felicito, estoy asombrada de la hazaña, pero no se alcen mucho pa' la proxima!
ResponderEliminarMientras màs viejos màs osados, se parecen a los protagonistas de la pelìcula la lista que ahora que estàn viejos aprovechan de hacer todo cuanto puedan. En todo caso mis felicitaciones por el logro, no es menor, pero unos cuanots gps y algo de lìquido no hará mal para la próxima travesía.
ResponderEliminarSalu2 desde el sur
Dedamota